lunes, 13 de abril de 2015



                 


             LA QUIETUD DEL ALMA.
             


                   Para sí se queda el silencio,
                   entre  súbita carencia, entre la nada.
                   Dueños los sentidos del espacio y
                   el momento, ya no soy casi nada.

                   Rescátame amor de este limbo,
                   que no controlo, que me mata.
                   Aprovecha e iníciame, que yo, por salir
                   de aquí hare mías tus enseñanzas.

                    ¿Como pude caer en la sutil trampa?
                    Acaso un instante, donde vi una piedra
                    en la que desentenderme de mi alma cansada,
                    de la dura carga.

                    Alarga las manos y guía mis pasos hacia
                    la magia que ampara. Date prisa, o me disolveré
                    en esta ausencia que me atrapa,
                    que me llama y desarma.

                    No me ves, no me escuchas,
                    no me sientes, mi tedéum se apaga.
                    Tardía es la luz que ampara,
                    al que ya no es nada.


                     


                           
                     

6 comentarios:

  1. Entre lo sacro y lo profano anda este poema. Una llamada a lo infinito, aquello que nunca se presta a ser cogido, para que se pueda crear un mundo nacido del alma, que no está muda.
    Me ha gustado mucho.

    Un abrazo

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    1. Así es Yolanda. No esta mal sacar de vez en cuando lo que llevamos dentro realmente ya que es posible que se pueda vivir confundido entre lo cotidiano y no darnos (darme) cuenta del lo que llevamos por dentro.

      Muchas gracias por pasarte, comentar y dar tu opinión o si me lo permites tu percepción ya que es importante para el que escribe saber si se llega o no.

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  2. Hola Francisco,

    Hermosa forma la tuya de describir la tristeza, la desazón, la sensación de no ser nada. Siempre hay una puerta de salida y por ella hay que luchar hasta el final. Buscarla es el primer paso :)

    Me ha gustado mucho tu faceta de poeta, gracias por regalarnos estos sentidos versos.

    Un abrazo!!

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    1. Muchas gracias Julia por tus palabras. Siempre, en algún momento, las fuerzas fallan, peso afortunadamente es todo transitorio y si sabemos ver podemos encontrar esa ``puerta de salida´´ a la que te refieres

      Saludos.

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  3. Muy melancólico. Lo interpretó como el último suspiro e, incluso, como se encuentra la paz en ese estado :) Es precioso Francisco. Me encantó, un abrazo

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    1. Gracias por pasar y dejar tu comentario. No cabe duda que cuando todo atisbo de esperanza se pierde solo nos queda la paz final, un momento donde ya solo nos queda ser honestos con nosotros mismos. Me ha gustado mucho tu interpretación que va un poco mas allá de lo que intentaba plasmar y que no cabe duda de que es muy válida

      Saludos y gracias nuevamente.

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